Aún así, las pocas horas de Sol que tuvimos ayer, logró formar algunas corrientes convectivas que dieron lugar a importantes Cúmulos Congestus a últimas horas de la tarde, que eran iluminados por el ocaso. Crearon bonitos torreones de agua, la verdad, aunque lo mejor estaba por llegar.
Pileus atravesado por el Cúmulos Congestus, visto desde el Observatorio Meteorológico de Cehegín “Ciudad”
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Hacía tiempo que no los capturaba y ayer de nuevo pude disfrutar de estas formaciones nubosas de tipo convectivo tan características y bellas al atardecer. Efectivamente, son los “Pileus”. Observando la imagen superior aparentemente se trata de una nube normal, pero fíjense en su parte mas alta. Como pueden comprobar se observa como una especie de “membrana nubosa” que crece en la parte mas alta del Cúmulo Congestus, cuya expansión hacia arriba consigue romperla. Esta “membrana nubosa” se forma cuando el desarrollo convectivo atraviesa una capa muy húmeda de la atmósfera. Su empuje la eleva a la vez que la enfría y, como su humedad absoluta es muy alta, no necesita mucho enfriamiento para condensarse. La aparición de estos “ovnis convectivos” coronando estos monstruos de agua, son signo inequívoco por un lado, de la potencia que tiene el desarrollo y por tanto su corriente ascendente, y por otro, la humedad que existe en capas altas y por tanto un buen ambiente para que ese desarrollo termine por formar un Cumulonimbo, con su posterior tormenta. Y la verdad es que así fue, esos desarrollos, que en el reportaje que os muestro mas abajo se ven al norte de Cehegín, dieron lugar a una importante tormenta al norte de Calasparra, con el límite de Albacete, que descargó hasta 22,4 mm en tan solo unos minutos en Minateda, una población a unos 5 Km al sur de la ciudad albaceteña de Hellín. Pinchen sobre el enlace inferior para ver el reportaje completo.
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